La rinitis es una de las condiciones médicas más prevalentes en todo el mundo. Sea debida a una alergia o a un catarro, es una de las causas más frecuentes de absentismo laboral. La congestión, el moco, la dificultad respiratoria nasal y sensación de presión en la nariz son molestias que hasta que se sufren, uno no se da cuenta de lo limitante y molesto que puede llegar a ser. Disminuye de manera significativa tu rendimiento y tu calidad de vida.
El tratamiento de base de las rinitis son los lavados nasales. Cada vez los recomiendo más, ya que mis pacientes sienten los beneficios de esta práctica diaria, no solo a nivel de la nariz, sino también a nivel de los oídos y la garganta.
Hay mucha gente que utiliza preparaciones caseras de agua con sal o recoge agua del mar para realizar el lavado. Mi recomendación es que no te compliques y acudas a una farmacia para adquirir un producto específico, con todas las garantías de calidad y esterilidad. Compra agua de mar estéril ya que, además del agua salada, tiene oligoelementos beneficiosos para la nariz. Puede ser isotónica o hipertónica. La hipertónica tiene más concentración de sal. Yo recomiendo isotónica para lavados diarios, la hipertónica si hay mucho moco y congestión.
Pero, ¿cómo hacer un lavado nasal correcto? Aquí tienes las instrucciones perfectamente detalladas para convertirte en un experto:
- Ponte delante del lavabo o fregadero.
- Inclina tu cabeza hacia delante y ladea la cabeza ligeramente al lado contrario a la fosa que vas a lavar. Por ejemplo, si vas a lavar la fosa derecha, inclina ligeramente la cabeza a la izquierda.
- Introduce el irrigador o pitorro del agua de mar o suero que hayas comprado, en la fosa nasal, en este caso en la derecha. Los productos para lavado suelen ser botellas presurizadas que disponen de un pitorro que se puede introducir en la fosa nasal. Si es con suero fisiológico que no dispone de este pitorro, utiliza una jeringa de 10 mililitros.
- Acciona el pitorro del producto durante 1 ó 2 segundos en la fosa nasal. Lo que intentaremos conseguir es que el agua de mar o suero salga por la fosa nasal contraria.
- También recomiendo inspirar ligeramente a la vez que se aplica el producto, para que caiga a la garganta y lo puedas eliminar por la boca.
- A continuación, hacer lo mismo por la fosa nasal contraria.
- Una vez realizado el lavado, podemos sonarnos la nariz, teniendo cuidado de no hacer mucha presión dentro de la cavidad nasal para que no se nos vaya el líquido a los oídos.
Esto se puede repetir las veces que se desee. Lo recomendable es hacer el lavado nasal al menos una vez al día. Yo suelo recomendarlo 2 veces al día, por la mañana y por la noche.
El proceso es muy sencillo y notarás los beneficios desde el primer momento. Ya tienes toda la información necesaria, ¿a qué esperas para empezar a lavar tu nariz y respirar?