La sordera o hipoacusia consiste en la pérdida de la capacidad de oír. Es un problema muy frecuente, que genera mucha preocupación, por lo que es un motivo de consulta muy habitual, tanto en las consultas del médico de cabecera como en la consulta del otorrinolaringólogo.
Las sorderas tienen como origen múltiples causas posibles. Aunque es más frecuente en la vejez, puede darse a cualquier edad.
Algunos tipos de sordera frecuentes son los siguientes:
- Tapones de cerumen o cuerpo extraño en conducto auditivo
- Infecciones de oído
- Secuelas de infecciones crónicas de oído
- Moco en el oído medio
- Problemas de la cadena de huesecillos
- Sorderas bruscas
- Traumatismos
- Por exposición a ruidos
- Problemas autoinmunes
Para poder determinar la causa es fundamental realizar: una entrevista clínica adecuada, una cuidadosa exploración física y pruebas audiológicas como la audiometría y la impedanciometría. En ocasiones será necesaria la realización de otras pruebas como técnicas de imagen (TAC, resonancia) o estudios de laboratorio (analíticas).